Aunque estamos seguros de que el aluminio es un material resistente para la fabricación de ventanas, este puede sufrir algún tipo de desperfecto durante su vida útil, sobre todo en la parte más débil, el sistema de los cierres de aluminio, pero en ese caso hará falta reparar la ventana, tan solo.

Son muchos los motivos que pueden llevar a que los cierres de aluminio no estén en perfecto estado. Ya sea por el propio uso que hará que haya un desgaste lógico, porque ha habido un cambio climático fuerte que termina afectando a los cierres o simplemente porque existe un mal uso de los mismos.

En estos puntos, es importante entonces contactar con un experto en ventanas de aluminio que nos pueda solucionar el problema para que nuestra ventana de aluminio siga funcionando como siempre.

Cuando los cierres de aluminio no funcionan correctamente, la ventana no queda bien cerrada, no es estanco y por ende existirán fugas y pérdidas de frío y calor haciendo así que se reduzca el grado de aislamiento térmico, acarreando un incremento del gasto de la calefacción o el aire acondicionado, igualmente sucede lo mismo con el ruido, con lo que el aislamiento acústico será inexistente, haciéndonos convivir diariamente, en nuestro hogar, con todo el ruido de la calle.

Pero más allá de esto, el hecho es que cabe la posibilidad real de que nuestro hogar sea un poco más inseguro y quede expuesto cierres de aluminio en las ventanasa los «amigos de lo ajeno», debido a que los cierres de las ventanas de aluminio no funcionan correctamente, seguridad.

En el momento en que el profesional se presente, comenzará entonces el trabajo para reparar los cierres. Primeramente hay que observar si los cierres de aluminio son los que se encuentran en mal estado y si en ningún caso están rotos, ya que en esa circunstancia tendrá que cambiarlos por completo.

Si no están rotos, a partir de allí, si lo que se trata es de regular lo cierres de aluminio, entonces se debe tirar de la zona del enganche interior que facilita el cierre de la ventana hasta que el orificio que hay allí mismo quede a la vista. En ese momento es cuando se procede a aflojar el tornillo que tiene como fin el hecho de fijar el enganche interior del cierre.

El tornillo se va a ir aflojando poco a poco hasta que se desplace el enganche y se lo deje en la posición correcta. Cuando tenemos la posición indicada se vuelve a presionar, de nuevo, el tornillo. Ahora sí es momento de comprobar si la ventana de aluminio cierra como antes.

cierres de aluminio en las ventanas

En caso de que el cierre esté doblado, se tendrá que sacar con ayuda de las herramientas y el tornillo y enderezarlo hasta que se quede en la posición original.

Por supuesto que en muchos casos, cuando el cierre de aluminio está muy afectado, el experto te recomendará que haya un cambio del mismo para que no se sufran inconvenientes a futuro y que de esa forma la ventana quede exactamente como estaba antes o incluso mejor.

Como puedes apreciar, los cierres de aluminio cuentan con posibilidad de reparación, con lo que si estás sufriendo problemas al cerrar tu ventana, no te preocupes y contacta con un profesional para que te de las mejores alternativas y la mejor solución de reparación.